MONICIONES Y ORACIÓN DE LOS FIELES - CICLO B

Domingo de Ramos en la Pasión del Señor

P. Félix Jiménez Tutor, escolapio

   

 

 Escritura:

Isaías 50,4-7; Filipenses 2, 6-11; Marcos 15, 1-39

ENTRADA

Hermanos, recorrido el camino cuaresmal nos acercamos, hoy, a la primera salida llamada Jerusalén, la ciudad santa.

Unidos por la fe a todos los cristianos del mundo queremos aclamar y proclamar a Jesús como nuestro Mesías, nuestro Rey y nuestro Salvador.

Procesionamos con palmas y ramos de olivo, con cantos y alegría a la casa del Señor y estrenamos la Semana Santa. Cristo está en medio de nosotros y actúa en nuestros corazones y nosotros revivimos su muerte y su resurrección y le gritamos: sálvanos.

MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA

Jesús, el siervo de Dios, abre nuestros oídos a la escucha del mensaje salvífico. Un oído abierto que no se escandaliza ni se avergüenza ante el sacrifico y la humillación que experimenta el siervo de Dios.

Escuchemos la proclamación de la Palabra de Dios.

MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA

Sólo el amor salva. Sólo ante Cristo el cristiano tiene que hincar las rodillas. Sólo a Cristo, el cristiano  tiene que confesar como su Señor porque sólo él muere en cruz por nosotros.

Escuchemos la proclamación de la Palabra de Dios.

MONICIÓN A LA PASIÓN

Jesús entra en Jerusalén y es aclamado como el Enviado de Dios.

Este mismo Jesús saldrá expulsado de Jerusalén para ser ejecutado extramuros.

Muchos personajes van a desfilar ante nosotros, pero Jesús es el hombre al que nosotros tenemos que mirar, seguir y amar.

Escuchemos el relato de la Pasión.

ORACIÓN DE LOS FIELES

  1. Oremos por la Iglesia, extendida por toda la tierra, para que ponga su confianza y su seguridad sólo en Jesucristo.

  2. Oremos por los gobernantes de las naciones para que su prestigio y su ambición se vuelquen en servicio y en preocupación por crear un mundo más solidario, más justo y más en paz.

  3. Oremos por los enfermos, los olvidados y los marginados de la sociedad para que experimenten la bondad de Dios y la ayuda generosa de los ricos y los privilegiados.

  4. Oremos por nuestra comunidad parroquial para que aclame y sirva a su Rey y Salvador hoy y siempre.

  5. Oremos por los niños y jóvenes para que con la ayuda de sus padres y maestros descubran a Jesucristo y su mensaje de amor y lo sigan.

  6. Oremos por los que ya comparten la muerte de Cristo para que compartan también con él la gloria y la alegría de la resurrección.