En el Talmud se cuenta la
siguiente historia.
El rabino Jehoschua
ben Levi encontró una vez al profeta Elías y le preguntó: “¿Cuándo viene
por fin el Mesías”? El profeta respondió: “Vete y pregúntaselo a él
mismo”. ¿Dónde lo puedo encontrar?. “Está sentado a la puerta de la
ciudad de Roma”. ¿Y en qué lo puedo reconocer? Está sentado entre los
pobres y enfermos y venda sus heridas”.
El rabino Jehoschua
ben Levi se puso en camino hacia Roma y encontró allí al Mesías sentado
a la puerta como lo había descrito el profeta.
Fue hacia él y dijo:
La paz sea contigo, mi Señor y Maestro.
Y él contestó: La paz
sea contigo, hijo de Levi.
¿Cuándo vendrá mi
Señor finalmente, para redimirnos?
La respuesta fue:
HOY.
Entonces el rabino
Jehoschua ben Levi regresó al profeta y le dijo lleno de amargura: El
Mesías me ha engañado. Dijo que vendría hoy, pero todavía no está ahí.
A lo que el profeta
respondió: Mientras no comprendas lo que significa “HOY”, no puede venir
entre tanto.
|












|