MONICIONES Y ORACIÓN DE LOS FIELES - CICLO C

Solemnidad de Todos los Santos

P. Félix Jiménez Tutor, escolapio

   

 

 Escritura:

Apocalipsis 7, 2-4.9-14; 1 Juan 3, 1-3;
Mateo 5, 1-12

ENTRADA

Hermanos y hermanas, bienvenidos a la fiesta de Todos los santificados por la gracia de Dios y por la sangre de Cristo. "Sean santos", nos dice el Señor. Hoy celebramos esta gran comunión con todos los santos del cielo y todos los que vivimos esta hermosa vocación a la santidad, la vocación del cristiano.

Con fe en el Dios que nos santifica y con la alegría de vivir en su amistad, comencemos la celebración de la Eucaristía.

PRIMERA LECTURA

Canto de los redimidos, de los salvados por la sangre del cordero.

Canto que celebra a hombres y mujeres de toda raza, lengua y nación.

Canto al Dios de la salvación.

Escuchemos la proclamación de la Palabra de Dios.

SEGUNDA LECTURA

San Juan proclama la razón de nuestra alegría y de nuestra esperanza: el amor de Dios que nos hace hijos suyos.

A los que no conocen el amor de Dios, hoy, les invitamos a dejarse inundar por su luz y su promesa de salvación.

Escuchemos la proclamación de la Palabra de Dios.

EVANGELIO

El Señor nos llama dichosos y felices.

El Señor nos asocia al Reino de los santos, a la tarea de hacer felices a los hermanos.

El Señor es nuestra bendición y felicidad.

Escuchemos la proclamación del evangelio.

ORACIÓN DE LOS FIELES

  1. Oremos por los gobernantes de las naciones para que reconozcan la imagen del creador en todas las personas y legislen a favor de los más necesitados.

  2. Oremos por los líderes de las iglesias para que, a pesar de las persecuciones, sean un rayo de esperanza para todos.

  3. Oremos por todos nosotros que formamos la iglesia de Jesús, para que veamos siempre su presencia en los pobres, los perseguidos y los marginados.

  4. Oremos por todos los que nos damos cita en nuestra iglesia del Pilar para que no olvidemos a Dios que es la fuente de toda bendición y de la paz.

  5. Oremos por los difuntos de nuestra parroquia y de nuestras familias para que reciban la corona de gloria reservada a los santos.